Existen múltiples dietas para perder unos kilos extras, algunas reducen una amplia cantidad de alimento en cambio otras agregan determinados nutrientes fundamentales. La dieta de la manzana se basa en agregar varias unidades de la fruta a lo largo del día. La base de funcionamiento de la dieta es que se gasta energía en el proceso digestivo, el funcionamiento del estómago y del resto de los órganos consumen energía, por lo tanto estimular la digestión contribuye a la quema de grasa del organismo.

Para llevar adelante la dieta de la manzana, se deberá controlar no pasar más de 3 horas diarias sin ingerir alimentos. Al llegar a las 3 horas desde la última ingesta se deberá comer una manzana, la misma proporciona una sensación de saciedad que disminuye la ansiedad por comer otros alimentos. Se deben comer entre 5 a 7 manzanas diarias para lograr un buen impacto en el descenso de peso. La manzana puede comerse media hora antes del almuerzo  y la cena contribuyendo a la sensación de saciedad, situación que produce ingerir menor cantidad de alimento en las comidas principales, con menor oferta de calorías.
La dieta de la manzana es cómoda de llevarla adelante y contribuye a un mejor aporte de fibra, minerales y vitaminas al cuerpo.